Deoleo, líder marquista en aceite de oliva, obtuvo en 2013 un beneficio neto de 20 millones de euros, frente a las pérdidas de 245,6 millones del ejercicio anterior motivadas por la decisión de abordar el deterioro contable de determinados activos. En un comunicado se informa que las ventas del ejercicio alcanzaron los 813 millones de euros, un 1,9% por debajo de la facturación de 2012, mientras que el EBITDA fue de 80,1 millones, un 9,2% menos. Aun así, el margen de EBITDA sobre ventas se situó en el 10%, lo que refleja la recuperación de la rentabilidad a pesar de un primer semestre del año muy complicado por la volatilidad del precio de la materia prima, que, unido a la crisis económica en esos mercados, motivó una notable caída del consumo en España e Italia, fundamentalmente.
La diversidad geográfica del negocio ha permitido compensar la situación de comienzos de año en España e Italia, que representan el 60% de las ventas y que son mercados más expuestos a las variaciones de la demanda. Aun así, el ejercicio terminó con un cambio de tendencia positivo en estas regiones.
Por otra parte, las medidas de eficiencia puestas en marcha por la compañía están generando ahorros y facilitando la gestión. Así por ejemplo, se ha logrado ajustar las necesidades de capital circulante mediante el desarrollo de un nuevo modelo de cadena de suministro. Del mismo modo, la plantilla de Deoleo se ha reducido en un 11% con respecto a 2012: a diciembre de 2013 el número de empleados era de 713.
El grupo entiende que el proceso de ajuste industrial ha concluido, por lo que, a partir de ahora, centrará esfuerzos y recursos en las áreas de innovación y desarrollo, cruciales para el crecimiento.
En el ejercicio 2013 la deuda financiera neta bajó en otros 152 millones de euros; esto es, un 24%, hasta situarse, a diciembre de 2013, en 472 millones. Por otra parte, la posición neta de caja al cierre del ejercicio era de 197 millones de euros. La reducción de la deuda se ha logrado con flujos de caja ordinarios y gracias a la citada mejora en la gestión del circulante y al nuevo modelo de cadena de suministro, que permite optimizar recursos.
Esta progresiva disminución del endeudamiento está permitiendo generar el clima adecuado y la confianza de bancos y proveedores, posicionando así a Deoleo en niveles de solvencia impensables hace tan sólo tres años. A diciembre de 2013, el grupo cumplía con todos los convenants financieros establecidos en el contrato de refinanciación del grupo.
Desde el punto de vista operacional, Deoleo aspira a cambiar el concepto del negocio del aceite de oliva para convertirlo en global en toda la cadena de valor. Esto implica, entre otras cosas, superar algunos conceptos que no permiten crecer a la categoría del aceite de oliva, poniendo el foco en el consumidor como inspirador de nuevos productos que se orienten a satisfacer sus necesidades reales. En este sentido cobra especial importancia la innovación y el desarrollo: Deoleo ha renovado su estrategia de I+D+i y trabaja ya para ofrecer al consumidor productos innovadores que le aporten un plus de salud y bienestar.
Por otra parte, en el ámbito corporativo y financiero, el mandato otorgado el pasado mes de noviembre para la reconfiguración del grupo persigue alcanzar una estabilidad financiera y accionarial a largo plazo que siente las bases de una compañía sólida y enfocada a maximizar su enorme potencial.
