El sector productor de aceite de oliva aventura que la tendencia de los precios del aceite de oliva en las próximas semanas será la de mantenerse o incluso subir ligeramente en esta campaña como consecuencia de la cosecha baja producida en España.  

 

El secretario de la Unión de Pequeño Agricultores (UPA) de Andalucía, Agustín Rodríguez, admite que es “imprevisible saber el camino que van a tomar los precios”, aunque reconoce que la tendencia es que “se mantengan en las actuales cifras”, en torno a los tres euros de media en origen para el kilo de virgen extra y de los 2,4 para los lampantes.

 

Sin embargo, entiende que en la conformación de los precios del aceite de oliva intervienen varios factores, como las condiciones meteorológicas, las expectativas de la próxima cosecha, el contexto internacional de cosecha del resto de países productores y “la presión que ejerce la gran distribución”.

 

Por su parte, Pablo Carazo, el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Jaén, afirma que si continúa el ritmo de exportaciones de aceite de oliva los precios tendrán que subir y se tendrán que regular “vía precios porque si hay demanda el mercado se autoregula”.

 

Señala que la franja actual de precios, comprendida entre los 2,4 y los cerca de tres euros, es “ideal” tanto para los productores y para los consumidores, porque no pone en riesgo las rentas de los agricultores ni el consumo de este producto.

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