Las últimas campañas de producción de aceite de oliva en España han hecho que recobre protagonismo el término de la vecería en el olivar, un fenómeno que indica que a una campaña de abundante cosecha de aceituna le siga otra de baja producción. Así lo pone de manifiesto la producción final de las últimas campañas oleícolas y las previsiones de la próxima, que corroboran la alternancia producida en las cosechas y las variaciones que se observan entre grandes y bajas producciones de aceituna.

 

Esta situación ha propiciado que se hayan registrado dos cosechas históricas de aceite de oliva en las tres últimas campañas y una de las peores de las dos últimas décadas, por lo que se ha conseguido romper el techo productivo y contabilizar las dos mejores cosechas de la historia frente a una de las peores. En el aumento de las cifras de producción de aceite de oliva han tenido mucho que ver, además de las nuevas plantaciones de olivar, la masiva proliferación de los regadíos en el olivar, un cultivo que hasta hace unos años era prácticamente de secano, por lo que el fenómeno de la vecería era más palmario.

 

Sin embargo, el agotamiento del olivo tras años de cosechas históricas, la heterogénea floración y la incidencia negativa en el cuaje de la aceituna, así como las condiciones meteorológicas adversas, se barajan como las causas que han acentuado que se pase de unas cosechas altas a unas bajas y cortas. Si echamos la vista atrás en las últimas cinco campañas los datos ponen de manifiesto las semejantes cifras de producción de aceite de oliva alcanzadas en España, con 1,4 millones de toneladas para las campañas 2009/2010 y de casi 1.392.000 para la temporada 2010/2011.

 

Sin embargo, el salto cualitativo se produce en la campaña 2011/2012, con 1.615.000 toneladas de aceite de oliva, lo que supuso hasta ese momento un nuevo récord de producción, aunque una campaña después, la correspondiente a la 2012/2013, la cosecha sólo alcanzó las 618.000 toneladas, de las que sólo en la provincia de Jaén, principal productora del mundo, se obtuvieron 140.000 toneladas. Y el registro productivo se batió en la presente campaña oleícola, la 2013/2014, la que toca a su fin este próximo 30 de septiembre, con 1.777.000 toneladas de aceite de oliva, la que por ahora ostenta las mejores cifras de la historia, tanto en producción como en exportaciones.    

 

Ahora las previsiones que vaticina el sector para la campaña 2014/2015, que comienza el próximo día 1 de octubre y que finalizará el 30 de septiembre de 2015, son las de una cosecha corta y baja, muy por debajo del millón de toneladas de aceite de oliva. Incluso la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) se ha atrevido ya a dar una estimación de cosecha para esta inminente campaña, que cifra en poco más de 700.000 toneladas en España, lo que supone un descenso del sesenta por ciento en relación con la pasada.

 

Así las cosas, el sector espera expectante las cifras del avance de cosecha que hará públicas la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía en el próximo mes de octubre, el conocido como el aforo de la campaña. EFE

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