La Feria de Maquinaria Agrícola de Úbeda celebrará su edición número 34 entre los días 15 y 18 de septiembre. Más de un centenar de empresas, 300 marcas y 20.000 metros cuadrados de exposición para un evento que ha sido presentado por el diputado de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Pedro Bruno, y el primer teniente de alcalde y concejal de Agricultura de esta localidad, Javier Gámez. La Diputación es uno de los patrocinadores de esta cita, “una ocasión para que los empresarios amplíen posibilidades de negocio y abran nuevos caminos en la comercialización de sus productos”. Así lo ha destacado Bruno, que ha señalado entre las novedades de este año la instalación de un mercado Degusta Jaén, en el que estarán presentes catorce empresas agroalimentarias de la provincia.

 

La feria contará con un espacio habilitado para que los expositores puedan hacer demostraciones de maquinaria y de sus diferentes productos. Además, habrá una carpa de más de 800 cuadrados para la exposición y venta de productos afines a esta feria, como fitosanitarios, textil o alimentación, donde se ubicará el Degusta Jaén. En esta misma zona también habrá una zona dedicada al aceite de oliva, un espacio instalado por el Centro de Interpretación del Olivar y Aceite.

 

Finalmente, la feria contará con otra carpa destinada a conferencias y ponencias, donde se celebrarán las I Jornadas “Olivar y Aceite de Oliva”, una de las novedades más destacadas de esta edición. El concejal de Agricultura del Ayuntamiento ubetense ha destacado el nivel técnico y la trayectoria de los expertos invitados, así como el “plus de calidad” que aporta esta acción formativa, en la que se hablará “sobre sostenibilidad, medio ambiente y calidad del aceite de oliva virgen extra”.

 

Gámez ha resaltado la importancia de esta feria a nivel comercial y agrícola: “Es un referente a nivel nacional y regional, tanto por volumen de negocio como por número de visitantes”. En 2015 se superaron las 15.000 visitas, cifra que este año “esperamos que se quede pequeña”. “Queremos ir avanzando, creciendo y dando posibilidades para que el olivar lleve ese valor añadido de maquinaria y calidad técnica; aspectos que, al final, generan riqueza y prosperidad”, ha concluido Javier Gámez.

 

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